domingo, 18 de septiembre de 2011

LAS PERSONAS GRANDIOSAS SE VAN; PERO SUS ACTOS TRASCIENDEN POR SIGLOS. PTG







El viernes pasado después del desfile, se llevó a cabo la inauguración de una  exposición documental y pictórica de un  personaje histórico nacido en este municipio,   “Emilio Alanís Patiño”,    en el archivo municipal,  y  estará expuesta para toda la ciudadanía, pero en especial para los estudiantes  en este espacio  hasta el 30 de este mes,  esta actividad   se anunció  en el  bando solemne de las fiestas patrias de éste municipio.
Fue en el mismo archivo municipal donde se llevó a cabo esta actividad, donde autoridades  municipales,    y  ciudadanos  se  reunieron  para darle la bienvenida a quién fue el medio,  para que esta documentación llegara a este municipio,  y permanezca en el archivo   como  una gloria  y  ejemplo para la ciudadanía.
El edil Pedro Tello Gómez en su mensaje dijo;   la grandeza de las personas  se mide en la medida de sus acciones, las personas grandiosas se van;  pero sus actos trascienden por siglos. “Estoy ante ustedes  para manifestar nuestra alegría y gratitud, por contar con parte de la documentación de la obra de Emilio Alanís Patiño, lo cual no hubiese sido posible sin la colaboración de Alejandro Trueba Carranza”.
Agregó  que toda ésta documentación fue debidamente inventariada y  se plasmó en el libro de actas del ayuntamiento, bajo el acuerdo número 11 del acta de sesión 127  del seis de julio de éste 2011,  y así se creó, el fondo documental   que denominaron con el mismo nombre del personaje homenajeado. Y que ahora  el  archivo municipal se ve enriquecido  al resguardar tan valiosos documentos, todos de valor histórico,  que se preservarán, y prevalecerán en el repositorio, para consultas especiales de quienes estén interesados en realizar investigaciones sobre   este gran personaje.
Emilio Alanís Patiño nació en esta ciudad en 1905 y falleció  en 1998,  ingeniero agrónomo de profesión,  especialista  en Industrias Agrícolas. Terminó sus estudios en Chapingo, México, en 1928. Presentó su examen profesional el 17 de octubre de 1930 con la tesis: La Restauración del Estado de Morelos.
Al ser funcionario federal,  en los años 60s y 70s  apoyó fuertemente la educación  en esta ciudad, entre lo más destacable es   que por su intervención se logró la construcción de la secundaria Federal Melchor Ocampo,  donde en días pasados se construyó un auditorio que lleva el nombre de su benefactor,   la  Primaria Benito Juárez y otras más,  además fue investigador,  fue pilar de la Estadística en México, participó en la realización del Primer Censo Agrícola Ganadero y Ejidal del país los años de 1929 y 1930, entre otros muchos logros por los que recibió reconocimientos y congratulaciones hasta de presidentes de la republica Mexicana e internacionales.
Durante el desarrollo de su vida, siempre estuvo atento al acontecer de México y del mundo, circunstancia esta que le motivó a escribir en un estilo muy singular su autobiografía a la que denominó  “Vivir entre dos siglos”, en la que describe y analiza su entorno de manera paralela a la narración de su vida con su singular modestia y mesura.
Por su parte  el ingeniero Trueba Carranza  relató  cómo  fue que conoció al Ingeniero Emilio Alanís, que fue por medio del Premio Nacional de Maestría en Ciencias Agrícolas,  lo cual era un premio importante   y jugoso  para jóvenes investigadores, promesas  en el desarrollo agropecuario,   que contaba con un fideicomiso anónimo,  que al final se enteró,  después de  preguntar y de atar cabos;  conoció a  Alanís Patiño de 70 años,  quien daba el premio,   contó  que lo sorprendió por su sencillez y su humildad,   un hombre de mirada bondadosa.
  “Porqué  tanto desprendimiento cuando todas las personas buscan la acumulación de riquezas; porque tanta generosidad desde el anonimato sin esperar un gracias,  cuando el promedio de la gente busca consolidar  su seguridad personal;   porque dar su apoyo a un futuro que puede ser  incierto  a través de  unos jóvenes  promesas;  porque promover el desarrollo de las instituciones cuando el ya había dado lo que le correspondía:  Un hombre austero, sincero, decente y visionario, así era Emilio Alanís Patiño,   y ahora  para gloria y ejemplo  de  su tierra natal, está en este  municipio gran  parte de la documentación  que avala sus logros.  A este personaje el alcalde le entregó un reconocimiento por su aportación y la secretaria municipal  Ángela Durán Hernández le entregó  una copia certificada del acta de cabildo donde  se creó el fondo documental Emilio Alanís Patiño.

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